COMPETUR, la alianza por el turismo competitivo en España, resalta la necesidad de adoptar mayores medidas de choque que las aprobadas para el sector turístico y adecuarlas a las dificultades en las que se encuentra inmerso el turismo en nuestro país.
Las recomendaciones de no viajar a España y la imposición de cuarentenas a turistas procedentes de nuestro país por parte de algunos de nuestros países vecinos como Reino Unido, Holanda, Francia y Alemania, afectan gravemente a nuestro sector turístico y dificultan aún más su recuperación tras la crisis sanitaria.
Si bien la alianza valora los esfuerzos del Gobierno para alcanzar un entendimiento con los correspondientes gobiernos europeos, es importante señalar el efecto devastador que estos eventos están teniendo sobre nuestro sector turístico así como en sectores tan relevantes para nuestra economía nacional como la hostelería, ya que ponen en peligro un total de 8.700 millones de euros de ingresos entre agosto y septiembre.
Estas decisiones se producen en un momento crítico para la recuperación del sector y nuestra economía, en el que las empresas están realizando importantes esfuerzos por asegurar su continuidad tras la crisis sanitaria.
Frente a este escenario, en el que el futuro del sector turístico vendrá previsiblemente marcado por dificultades, COMPETUR destaca la relevancia de adoptar medidas que permitan responder con rotundidad a los problemas a los que se enfrenta el sector.
Nuestros vecinos europeos ya se adelantaron para proteger a su sector, tomando medidas de magnitud para apoyar su turismo e incluyendo en sus propios Planes Marshall medidas fiscales y económicas de gran relevancia y con anticipación.
Tal y como recoge COMPETUR en su análisis comparativo “La evolución de los Planes Marshall para salvar el turismo en Europa” la reducción del IVA a los productos de hostelería se ha convertido en una de las medidas estrella anunciadas o adoptadas por los países de nuestro entorno, para fomentar la demanda y compensar las dificultades que atraviesa el sector.
Además, España, junto con Portugal ha sido el único país europeo en no aprobar bonos turísticos para fomentar el consumo en nuestro país y con el que, sin embargo, se lograría reducir la vulnerabilidad del sector frente a las decisiones unilaterales de otros países.
La situación requiere además de un apoyo económico suficiente, que se encuentre al nivel de la inversión realizada por nuestros vecinos europeos (Francia, Grecia e Italia).
Si bien estas medidas en nuestro país siempre han sido necesarias, la situación actual a la que se enfrenta nuestro turismo las convierte en aún más imprescindibles.
Una política fiscal y económica ambiciosa, permitiría que España no se quedase atrás en el apoyo a su sector turístico, y mitigaría el serio impacto que actualmente está desplegando las circunstancias imprevistas a las que se enfrenta el turismo y nuestra economía.