Jesús Acín: “Cuando se emprende en un sector, puede ser por vocación de crecer o por necesidad, para adecuar tu oferta a la clientela”

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Inició su andadura en restauración ayudado por sus hermanos y madre, con sólo 16 años, cuando en 1967 abrió un merendero frente a la gasolinera familiar en Huesca, que en la actualidad es la Venta del Sotón. Ya con 21 años regenta el Casino de Huesca y organiza, junto con sus hermanos, conciertos en un recinto municipal. En 1989 se hace cargo de El Cachirulo y mediados de los 90 se hace con la concesión del restaurante de la Feria de Zaragoza, tomando en 2016 la gestión integral de la restauración de la misma. Es en la Feria, precisamente, donde abre su primera cocina central que, con el tiempo, sustituirá por otra más grande, de 2.000m2. A finales de esa década abre otros dos negocios para atender a concesiones administrativas y catering a domicilio. En la última década toma la concesión de dos Casinos, así como acomete la rehabilitación y construcción de varios proyectos: Hotel ciudad de Ejea, complejo de 70.000 m2construidos y 20.000 entre aparcamientos y jardines, espacio modulable en la Expo con una parcela de casi 6.000 m2, restaurante en el Teatro Principal de Zaragoza, Palacio de Larrinaga, Hostal de las Palmeras.
Jesús Acín ha sido galardonado con el Premio Nacional de Hostelería al Empresario Hostelero.

¿Qué valoración hace del premio que le han concedido sus compañeros empresarios de hostelería?
Hay muchas personas que podrían haberlo obtenido. Por ello, lo recibo con humildad y agradecimiento y me sirve de estímulo para continuar.

¿Qué destacaría como hechos más relevantes de su carrera como empresario hostelero?
Los primeros años. Tres hermanos muy diferentes que formábamos un equipo equilibrado, tanto por nuestras personalidades como por querer encontrar (y conseguirlo), un espacio profesional en donde todo el mundo cedía o dejaba el  protagonismo, y la figura de mi madre que, con su diligencia, sobriedad, trabajo, equilibrio y sin necesitar muchas palabras, se convirtió en una hostelera honesta partiendo de la crianza de una familia numerosa. Sus silencios eran muy elocuentes y la búsqueda del equilibrio para quien ella veía peor puntualmente y  auparlo al conjunto, suponían un equilibrio para todos y un gran desgaste que siempre lo asumió, no como carga, sino como amor de madre. Crecer en lo material con equilibrio y sobre todo “saber escuchar al cliente “, fue para mí el más significativo complemento de lo anterior.

¿De un merendero, gasolinera familiar, a la Venta del Sotón, además de con 21 años en el Casino de Huesca, cómo ha sido la evolución, los momentos mejores y peores de tantos años?
Los mejores son innumerables porque nuestra actividad, pese a su dureza y la poca consideración que algunas personas tienen con la misma, tiene para otros un componente donde no sólo interviene la prestación de un servicio y el pago del mismo, sino que permite relacionarte con personas de todo tipo, te incluyen en su alegría porque las cosas han salido bien y además te dan las gracias ¿Se puede pedir más? Respecto a los peores….¡¡Tengo muy mala memoria!!

Expo, Teatro Principal, Feria de Zaragoza, Palacio de Larrinaga y Hortal de las Palmeras…. ¿Es muy emprendedor, aprovecha las oportunidades que se le presentan para seguir invirtiendo?
Cuando se emprende se hace generalmente por el deseo de crecer, de ir completando tus servicios, de proporcionar otros nuevos… Eso, cuando uno lo desea.
Otra forma de emprendimiento se da, y especialmente desde 2009, como consecuencia de una variación en los gustos, menor capacidad de gasto y superiores exigencias, que te obligan a cambiar tu modelo, en parte o en todo, para adecuarlo a lo que demanda la clientela. En definitiva, unas se hacen con deseo y otras por necesidad.

¿Es bueno diversificar en diversos negocios y empresas?
Depende. Sobre el papel, sí. Pero tal vez uno sólo consigue ser minúsculo en cada actividad que desarrolla. Si no diversifica, corre riesgos pero es más fuerte respecto al que sí lo hace. Yo soy partidario de diversificar las propuestas dentro de tu mismo sector. Hacer cartas, banquetes, catering, comida de 5ª gama, restaurantes de más o menos precios… No obstante, la personalidad de cada uno y las circunstancias hacen que se tomen caminos variados o uniformes.

¿Cuántos trabajadores tiene a su cargo?
El número de empleados fijos oscila entre 80 y 85. Respecto a los extras, los fines de semana pueden ser 100 o 125 más, con puntas de casi 200 personas.