España vuelve a ocupar la primera posición en el ránking mundial de la competitividad del turismo según el Índice de Competitividad de Viajes y Turismo del Foro Económico Mundial. El informe se publica cada dos años y analiza el comportamiento de 136 países a través de 14 áreas vinculadas al mundo del turismo que van desde los precios, a las infraestructuras, pasando por las condiciones sanitarias y los recursos naturales, y extrae una nota media para economía. En esta edición, la institución mejora una décima la nota de España, hasta un 5,4 sobre 7, gracias sobre todo a sus infraestructuras, la seguridad y el patrimonio cultural. En el lado contrario, entre las principales debilidades de España, el estudio destaca su menor competitividad en precios o la burocracia en los negocios.
De los 10 primeros puestos del ránking de competitividad del turismo, la mitad están ocupados por países europeos y todos por economías avanzadas. Por detrás de España se sitúan Francia y Alemania, seguidos de Japón, Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Italia, Canadá y Suiza.
España consiguió por primera vez liderar el ránking mundial de la competitividad del turismo en 2015, después de ocupar la cuarta posición en 2013 y la octava en 2011.