“Estamos trabajando para desarrollar un Plan de renovación que mejore la eficiencia energética del sector”

Recién llegado a su nuevo cargo, el Ministro Álvaro Nadal nos cuenta sus propuestas para este año: potenciar la desestacionalización y la diversificación de productos que aumenten el gasto de los turistas que nos visitan con cifras de récord. Entre sus proyectos, la digitalización de pequeñas empresas hosteleras y el plan para renovar maquinaria en bares y restaurantes, una reivindicación de FEHR.

 

Acabamos de cerrar un nuevo año con récord de llegadas de visitantesextranjeros y también aumento de gasto. ¿Cómo valora estos datos?

El sector turístico ha demostrado ser la industria más dinámica en el proceso de recuperación, y el año 2016 ha sido un ejemplo de que España es una potencia turística. Hemos batido el récord de visitantes superando los 70 millones por primera vez en la historia. 75,6 millones de turistas se decantaron por nuestro país, lo que supone un 10,3% más que en 2015. Nunca habíamos tenido un número de visitantes de esta magnitud. Además, esos turistas han gastado 77.625 millones de euros y el gasto diario se ha situado por encima de los 1.000 euros.

¿Hay margen de mejora para seguir creciendo?
Por supuesto que hay margen de mejora. Trabajamos en nuevos productos que generan nuevas necesidades y atraen a clientes. Además, tenemos un recorrido muy grande con nuevos mercados que están empezando a descubrir España como puede ser el asiático.

¿Existe algún cálculo sobre la cifra de turistas que nos eligieron en lugar de otros países donde se vive una complicada situación política y económica? ¿Es cierto que estos “turistas prestados” son el motivo de tanto crecimiento?
España está considerada por el World Economic Forum como el país más competitivo del mundo en el sector turístico, y ese liderazgo lo hemos obtenido por méritos propios, porque además de tener una oferta privada de calidad, contamos con unos servicios públicos que garantizan el bienestar y la seguridad de los que nos visitan. Nuestras infraestructuras de comunicaciones y transporte, de suministro energético, de seguridad física y jurídica o de protección de la salud resultan cruciales para que los visitantes se sientan cómodos y satisfechos, y decidan repetir su visita.
Me parece una valoración injusta achacar los resultados de España exclusivamente a situaciones inestables o ataques terroristas en destinos competidores. España tiene un sector muy consolidado que mejora de forma continua, se moderniza y nos da estas cifras que nos colocan siempre en esa segunda o tercera posición a nivel mundial como potencia turística.

¿Para continuar evolucionando, hay margen para recibir más personas en los meses de máxima afluencia o para aumentar el gasto por turista con nuevos productos?
Nuestra apuesta es la de incrementar el gasto de los que nos visitan mejorando los diferentes productos turísticos. Una de las líneas estratégicas desde las que trabaja el Ministerio para mantener nuestros niveles de excelencia y calidad turística es la creación y comercialización de nuevas categorías de producto que contribuyan a lograr la desestacionalización, la diversificación geográfica (aumentar el turismo hacia las ciudades y zonas de interior) y la diversificación motivacional. El objetivo es continuar diversificando la dependencia del sol y playa mediante la creación de nuevos productos. Se trata, en definitiva, de promover un turismo ligado a experiencias que puedan disfrutarse durante todo el año y en todo el territorio nacional: turismo cultural, de compras, de negocios, de congresos, deportivo, gastronómico, enológico, etc.

“El turista es más sofisticado y es vital nutrir la Red con contenidos que le lleguen, además de utilizar el Big Data para conocer sus necesidades: conectar demanda y oferta de forma digital”

¿Qué fortalezas y qué debilidades tiene este motor de la economía española?
En cuanto a las debilidades, podemos hablar de la alta estacionalidad, la concentración geográfica y una fuerte dependencia del producto de sol y playa, que además está muy comodotizado. Respecto a las fortalezas, la buena imagen de España genera un alto grado de fidelización del cliente vacacional, especialmente el europeo: después de su primera visita, entre el 80% y el 90% repite. Además, tenemos una excelente conectividad aérea con destinos europeos y entre destinos españoles. Para finalizar, tenemos una Administración turística muy profesional a todos los niveles.

La mejora de la situación económica en nuestro país ¿Se nota en las cifras de viajeros españoles que salen al exterior y también los que se mueven por nuestros destinos?
Sin duda la recuperación económica ha favorecido el turismo interno. Las pernoctaciones de residentes en establecimientos hoteleros aumentaron en 2016 un 3,1% y, según la Encuesta de Turismo de Residentes elaborado por el INE, los residentes en España realizaron 61 millones de viajes en el tercer trimestre de 2016, un 4,6% más que en el mismo periodo de 2015. Pero es que además, el 91% de los viajes tuvo como destino principal el territorio nacional, con un incremento del 5% respecto al tercer trimestre del año pasado. Esto quiere decir que tenemos una demanda nacional a la que le gusta nuestra propia oferta.

De izda. a dcha.: Matilde Asián, secretaria de Estado de Turismo; Álvaro Nadal, ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital; y Manuel Butler, director de Turespaña

¿Qué previsiones manejan para este 2017 y qué propuestas hay para ampliar el ratio de visitantes, tanto con productos nuevos en los nichos maduros como de apertura de nuevos merdados?
Como he comentado antes, hay que apostar por la desestacionalización y la diversificación, tanto geográfica como motivacional. Tenemos diversas oportunidades donde hay que trabajar. La primera de ellas es la existencia de un segmento de población en nuestros principales países emisores con un alto poder de gasto turístico, lo que llamamos el segmento cosmopolita, más sofisticado y dispuesto a gastar más. En ese segmento, España tiene un enorme potencial de crecimiento. Por otro lado, hay que dirigirse a los mercados de largo radio, como Asia, en los que tenemos una gran capacidad de aumento si trabajamos en mejorar la conectividad aérea y agilizar la política de visados. Y para finalizar, la modernización y la reinvención de los destinos maduros. Hay zonas en España en las que esa renovación ha tenido gran éxito, y hay que seguir trabajando para ampliarla a otros destinos. En este sentido quiero destacar que este esfuerzo debe ser conjunto, de colaboración público-pública y público-privada. Esta coordinación entre todos los agentes que intervenimos en el sector son la base de la política de actuación turística que tenemos que realizar.

“Hay margen para mejorar el record de visitas y de gasto de turistas, en nuevos productos y también otros mercados, como puede ser el asiático”

¿Puede contarnos algo más acerca del nuevo sistema que prevén implementar para contar y conocer mejor a los turistas a través de sus redes móviles?
Uno de los pilares de la estrategia turística de futuro debe ser la utilización de las nuevas tecnologías. Ejemplo del uso es el proyecto que el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital pondrá en marcha muy pronto y que utilizará los datos móviles para generar estadísticas turísticas. Cuando un turista llega con su teléfono móvil desde otro país, sabemos de qué red viene, el momento en el que entró, a qué redes se ha conectado en España y, por tanto, qué lugares ha visitado. El proyecto pretende utilizar esa información, salvaguardando la privacidad de los usuarios, para tener un conocimiento a tiempo real de prácticamente el 100% de los turistas que vienen a España. Se trataría de una información mucho más actualizada y directa. Así, tanto el sector privado como las administraciones públicas podrían modificar su oferta y adecuarla a la realidad de la experiencia que busca el visitante, de manera que el gasto turístico se incrementaría.

La digitalización es una necesidad que constatamos para miles de pymes y autónomos del sector hostelero. ¿Cómo se puede potenciar este proceso desde la Administración Pública?
Debemos conectar de forma digital la demanda y la oferta. Para diferenciarse, el sector turístico debe distinguir el producto como tal, ofrecer cosas nuevas y diversas, pero, además de eso, debe comunicarlas. En un contexto en el que el turista es mucho más sofisticado y tiene en la Red su principal fuente de información y comparación, es de vital importancia nutrir esa Red con contenidos que lleguen al visitante. Además, hay que utilizar de ese Big Data para conocer el tipo de búsquedas que realizan nuestros potenciales clientes con antelación, de modo que la oferta tenga tiempo suficiente para reaccionar y orientar sus productos hacia lo que sus clientes están buscando. De esta forma, su aplicación nos permitirá ofrecer productos turísticos en España que se adaptarán a la demanda de nuestros potenciales visitantes.

“La economía colaborativa tiene que actuar una misma regulación y tributación que el resto de operadores, garantizando la seguridad jurídica del cliente”

¿Es posible regular la economía colaborativa que afecta al sector? ¿La fiscalidad y el cumplimiento de garantías sanitarias y otras normas pueden equilibrar la competencia con el resto de operadores?
Es evidente que la economía colaborativa está experimentando un gran auge y en este sentido hay que actuar bajo los principios de igualdad y no discriminación. A igualdad de producto, hay que tener el mismo tipo de regulación y tributar en igualdad de condiciones. Si tenemos una fiscalidad equivalente y una regulación equivalente a todo el conjunto de actividades, estaremos basándonos en un principio de igualdad, que es lo que hay que lograr. En segundo lugar, y dentro de ese principio, hay que tener en cuenta la seguridad jurídica de la persona que contrata un servicio, que debe garantizarse en todos los casos.

El foro mundial de turismo gastronómico, en el mes de mayo, tendrá lugar en San Sebastián. ¿Es un ejemplo más de la influencia de la gastronomía y la hostelería en el atractivo para los visitantes extranjeros?
Efectivamente, el III Foro Mundial de Turismo gastronómico de la OMT se celebra el 8 y 9 de mayo en San Sebastián y en él se debatirá, entre otros temas, sobre la rentabilidad del turismo gastronómico. La gastronomía forma parte del estilo de vida de nuestra sociedad y es un elemento intrínseco e indisociable de la experiencia turística. Está estrechamente vinculado al territorio y muchas veces es una imagen o icono clave en el posicionamiento de determinados países o regiones. Tiene un creciente peso en la demanda turística que hemos de aprovechar: en el 12,3% del total de turistas en 2015 realizaron actividades gastronómicas, y en especial en los destinos de interior. Se trata de un elemento dinamizador de la economía española con un fuerte impacto. Por este motivo, foros como San Sebastián Gastronomika o Madrid Fusión, que son líderes mundiales en este tipo de eventos, ayudan a mostrar nuestra mejor imagen de país.

¿Ve factible la propuesta de FEHR para desarrollar un plan de eficiencia energética que permita renovar maquinaria y elementos técnicos en los locales del sector?
En el sector turístico, como en todos, la sostenibilidad del destino, medioambiental, social y económica, cobra cada vez más importancia. En este sentido, aprovechando las diversas áreas del Ministerio, vamos a buscar sinergias con energía.
Ya hemos mantenido las primeras reuniones con la Federación Española de Hostelería (FEHR) para poner en marcha este plan de eficiencia energética. La Secretaría de Estado de Energía, junto con la empresa pública empresarial IDAE y en coordinación con la Secretaría de Estado de Turismo y la propia FEHR, va a crear un grupo de trabajo para el diseño y desarrollo de un Plan de renovación de los establecimientos turísticos, tal y como anunciamos recientemente, de manera que 200.000 bares, cafeterías, restaurantes y hoteles en España podrán reformar sus instalaciones para mejorar su eficiencia energética gracias a los fondos europeos derivados del Plan Juncker, con herramientas financieras como el BEI o el ICO. El objetivo es aprovechar las posibilidades de ahorro de energía, que muchas veces se encuentran en detalles relativamente simples como cambiar una puerta.■