Estabilidad en la confianza de los hosteleros

En el último trimestre de 2015 se consolida la confianza de los hosteleros mostrada a lo largo del año, aumentando los diferentes indicadores, según muestra el último Indicador de Confianza Hostelera realizado por la Universidad Nebrija y FEHR.

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El índice resultante de la confianza de los empresarios hosteleros con relación a la evolución de sus negocios, respecto al mismo trimestre del año anterior resulta positivo por séptimo trimestre consecutivo. Aunque se ha suavizado la valoración respecto al que resultó en el trimestre anterior, es mejor que la que se hizo en el mismo trimestre de hace un año.

La valoración respecto al pasado reciente también ha sido favorable, aunque menos que la que resultaba en los dos trimestres anteriores, debido en parte por la naturaleza estacional de esos trimestres a causa del turismo, al ser este sector muy influyente en la hostelería. A pesar de ello, la valoración es positiva, frente al cuarto trimestre del año anterior en que el resultado fue negativo.

Por su parte, el indicador de futuro refleja un cambio en la tendencia de los últimos años, en los que el cuarto trimestre del año se ha mostrado negativo. Este año por primera vez se muestra con una perspectiva más optimista ofreciendo un resultado de mejora de las expectativas de futuro. Los hosteleros confían en que la evolución de sus negocios va a ser mejor en los próximos meses.

De todo ello resulta una evolución favorable del Índice general de confianza, que en conjunto siguió con una tendencia positiva igual que los seis trimestres anteriores. La actitud de confianza se mantiene en el último trimestre aunque frena su crecimiento. Esto se debe en parte al efecto adverso causado por la estacionalidad del sector, al iniciarse el primer trimestre de 2016, período invernal, para el cual las previsiones de venta en la hostelería se proyectan a la baja.

Los profesionales del sector hostelero continúan considerando los costes de la energía y la mayor presión fiscal, como los problemas internos que más influyen en los resultados de sus negocios. Entre los de naturaleza externa se vuelven a señalar los costes financieros, seguido de la influencia de los precios bajos.