La incertidumbre es uno de los elementos más peligrosos de la economía porque contrae fuertemente la inversión y por tanto el crecimiento y la salida a la crisis. Y lo peor es que esa es la situación actual de nuestra economía. No sabemos si la rrecueraciópn de la crisis va a ser en forma de V (salida directa de la crisis, o en forma de W (salida con recaída).
En los próximos meses puede que el consumo se recupere ligeramente, pero sólo como mero espejismo. El nivel de endeudamiento de las familias españolas es muy elevado, con lo que una bajada del tipo de interés, como la vivida este año, va a poner en circulación un dinero que hasta hora quedaba en manos del sector bancario. Pero la situación económica no va a hacer que el repunte del consumo sea espectacular, ya que los negros nubarrones que se prevén en la economía española, van a llevar ese dinero al ahorro en un porcentaje muy alto. Por tanto, podemos tener esperanzas en el corto plazo, pero probablemente sólo hasta el tercer trimestre del 2010.
Por otro lado tenemos la alta deuda del sector público, tal y como decía este fin de semana Xabier Sala i Martin en su entrevista en el ABC “para pagar la deuda, la tendrán que inflacionar, y para inflacionar el déficit fiscal deberán subir los tipos de interés, lo que provocará una nueva crisis”. En definitiva, que si hay que pagar más intereses de las hipotecas se reduce en gasto de los consumidores, por tanto, menos cafés en nuestros bares y restaurantes.
Esta subida de los tipos de interés que probablemente comience en breve (a finales de 2010 o principios 2011), ante la recuperación de Alemania y Francia, hará que las familias españolas en medio de una recuperación económica vuelvan a reducir su renta disponible por el aumento de los tipos de interés.
Esta situación nos debería llevar a tener una recuperación en forma de sierra o W, como el pelo de Bart Simpson durante el próximo lustro. ¿Y cómo va afectar a la restauración? Esta situación en la hostelería nos va hacer estar en una situación difícil hasta el 2013. ¿Por qué afirmo esto? En un último informe de Euromonitor presentado en el mes de junio, se reflexionaba sobre la afección de los ciclos económicos a nuestra actividad, la restauración, en períodos de recesión y expansión. La principal conclusión era que la recuperación del sector ante una crisis tarda al menos dos años en recuperarse después de la salida del conjunto de la economía. En el estudio no se tenía en cuenta la situación de los tipos de interés y el presunto incremento de los precios del petróleo en los próximos años, y una perspectiva de paro de larga duración por lo menos hasta finales de 2012. Con esta perspectiva la restauración no se recuperará hasta niveles parecidos en término reales a los de 2007 hasta probablemente el 2014. Pero la previsión macroeconómica podría ser aun peor si se diese la previsible recuperación en W, es decir, que a mediados de 2012 con la subida de la inflación y de los tipos de interés, la contracción de la demanda interna hará que volvamos a tener una perspectiva de declive o entrada en recesión, lo que podría hacer que la recuperación de la restauración sea un espejismo hasta mucho más tarde. Por lo tanto, sólo nos queda esperar que la conclusión de Sala i Martin (“La salida de la crisis se asemejará al pelo de Bart Simpson, de dientes de sierra”), no se cumpla y para el año 2013 sólo se haya visto un solo valle (V).
Juan Ignacio Díaz
Secretario General FEHRCAREM