La facturación del sector de restauración registró en mayo un aumento del 6,6% en relación con el anterior mes de abril, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística. No obstante, en la comparación con el año anterior el volumen de ventas ha sufrido una caída del 9%, lo que significa prácticamente una repetición de lo ocurrido en el mes anterior, en el que se produjo una caída interanual del 8,8%. Las caídas interanuales de estos últimos meses tienen ya un especial significado, pues se refieren a meses de 2008 que ya registraban una evolución negativa de casi un 2% con relación a 2007.
La evolución del volumen de ventas de hoteles ha experimentado un crecimiento del 10,4% con relación a abril, pero en términos interanuales ha caído un 14,2%.
La diferente evolución del volumen de ventas de los dos subsectores hosteleros se explica, sobre todo, por la especial vinculación del alojamiento a la actividad del turismo y de los viajes, que se está viendo muy afectada, como se aprecia también en la caída de facturación de las agencias y operadores turísticos (-15,1%). La restauración tiene también un componente turístico muy elevado, pero su actividad no está tan vinculada a los viajes y desplazamientos, y en más de un 60% está determinada por la demanda de los consumidores en sus entornos habituales de residencia.
La encuesta de indicadores de actividad del INE también incluye la evolución de la actividad de la población ocupada que en el mes de mayo se vio reducida en un 6,3% en restauración y un 11,1% en alojamiento.